El músculo semimembranoso se encuentra en la parte interna posterior del muslo. Junto con el semitendinoso y el bíceps femoral, también situados en la parte posterior del muslo, forman lo que comúnmente se conoce como isquiotibiales.

El semimembranoso comienza en la parte posterior de la pelvis, en un punto conocido como tuberosidad isquiática. Se mueve hacia abajo a través de la parte posterior del muslo, cruza la articulación de la rodilla y termina en el lado interno superior del hueso de la pierna. El semimembranoso se mueve a través de la articulación de la cadera y la articulación de la rodilla y ayuda con los movimientos en las dos articulaciones. En la cadera, ayuda a extender la cadera y rotar el muslo. En la articulación de la rodilla, ayuda a flexionar la rodilla y rotar la pierna hacia adentro. Por lo tanto, el semimbranoso ayuda con muchas actividades cotidianas, como levantarse de una posición sentada y subir escaleras. También se utiliza en actividades como correr, saltar y levantar pesas de la parte inferior del cuerpo.

Es más probable que suceda una lesión del semimembranoso si lleva un estilo de vida activo. Por lo general, el músculo está sobrecargado y puede desarrollar inflamación o incluso un desgarro. El dolor que se siente en la parte inferior de la espalda, la limitación con movimientos como caminar o correr, el dolor en la parte posterior del muslo al pasar de una posición sentada a una posición de pie pueden ser indicadores de un semimembronaso lesionado. El dolor en la parte interna posterior de la rodilla también puede indicar una lesión en el semimebronaso conocida como tendinopatía del semimembranoso.

El bíceps femoral se encuentra en la parte posterior del muslo y, junto con los músculos semimembranoso y semitendinoso, crean lo que comúnmente se conoce como isquiotibiales.

El bícep femoral está formado por dos cabezas, la cabeza larga y la cabeza corta. La cabeza larga comienza en el lado interno de la pelvis, conocida como tuberosidad isquiática, y desciende por la parte posterior del muslo, pasando por la articulación de la rodilla y termina en la parte superior del peroné, uno de los dos huesos de la pierna. La cabeza corta comienza en la parte inferior de la parte posterior del hueso del muslo, se mueve hacia abajo a través de la articulación de la rodilla y se une a la cabeza larga que termina en la parte superior del peroné. La cabeza larga del bíceps femoral trabaja las articulaciones de la cadera y la rodilla, mientras que la cabeza corta solo trabaja la articulación de la rodilla. En la cadera, el bíceps femoral ayuda con la extensión y rotación del muslo. En la rodilla ayuda a la flexión y rotación de la pierna. También funciona en movimientos como correr, saltar y levantar pesas.

Las lesiones del bíceps femoral pueden ocurrir cuando se sobrecarga el músculo o se mueve repentinamente el músculo. El uso excesivo del músculo puede provocar inflamación e incluso un desgarro. Las lesiones en el bíceps femoral son más comunes en aquellos que involucran movimientos de fuerza como carreras de velocidad o levantamiento de pesas. El dolor que se siente en la parte inferior de la espalda, en la rodilla, el movimiento limitado al caminar o correr pueden ser indicadores de un bíceps femoral lesionado.

Para ayudar a prevenir lesiones en el bíceps femoral, es importante recordar calentar las áreas de la cadera, el muslo y la rodilla antes de comenzar un entrenamiento. El fortalecimiento del bíceps femoral se puede hacer con muchos ejercicios diferentes, como curl de isquiotibiales y peso muerto. Estos ejercicios se pueden hacer usando pesas, su propio peso corporal o con bandas de ejercicio. Después de completar un entrenamiento, es importante estirar el área para ayudar a prevenir lesiones.